¿En que manos de sombra abandonar el pasado?
Casi no quedan rincones
donde no respirar. Todos están llenos
de recuerdos boquiabiertos,
deseosos como lluvia que no cae.
Un cuerpo, y dos, y tres,
me buscan
con hambre...
Pero las olas no miran atrás.
Y la luna tiene cada día un brillo distinto.